DISCO 2

LADO C
1 - Not dark yet (Bob Dylan) 7:06
2 - That’s all, amen, close the door (Richard Thompson) 5:54
3 - Big Louise (Scott Engel) 7:42

LADO D
BONUS TRACKS
1 - Thirteen (Alex Chilton) 3:02
2 - I threw it all away (Bob Dylan) 2:09
3 - She was the one (Ch. Stamey – P- Holsapple) 3:00
4 - Andalucía (John Cale) 3:33
5 - Did I tell you (Ira Kaplan) 3:2

Grabado en estudio Tío Riki por Riki Musso circa 1994

Ficha Técnica

Concebido, tocado, arreglado, editado, degradado, secuenciado, mezclado, etc, por Andy Adler
Órgano en “That lucky old sun” por Riki Musso
“Laura wonders” y “That lucky old sun” mezclados por A.A y Riki Musso, en Tio Riki, MVD
El resto mezclado por A.A. e Inés Laurencena en Horror Mansion, Buenos Aires, fines del 2006
Nivelado de volúmenes: Gustavo De León y A.A. en SONDOR, MVD, Julio 2007
Retoques de “Big Louise” y “For ol´times sake”: A.A. y Gustavo De León en SONDOR, MVD, Agosto 2013
Masterizado: A.A. y Gustavo De León en SONDOR, MVD. Agosto 2013
Producción ejecutiva: A.A. y Ángel Atienza para Perro Andaluz.

Agradecimientos:

Durante los dos años y tanto que viví en Buenos Aires, mis idas y venidas a MVD fueron constantes. Siempre encontré manos amigas que me ayudaron en mis estancias. Pero este disco lo veo como un producto de mi tiempo en B.A. Ello hace que mis más sentidos agradecimientos vayan para los “gringos” que me dieron lo mejor de sí, sin pedir nada a cambio.

Marcelo Di Paola, Marcelo Di Gregorio, Patricia Pietrafesa, Pilar Shedevil, Inés Laurencena, Lautaro X, Dacho X, Culebra, Koko, el Pájaro, Papu y los playboys de los Kahunas, Marcelo Pocavida, Strangler, Gori Fantasmagórico, Pirulo, La Legión Burzaco, Pez, Los Colmillos, Astor Piazzolla, Los Alamos con su Peter Alfred, Martín Pérez, Xul Solar, Forgotten Boys, Satan Dealers, Mariana Enriquez, Jonah, Jimena, Los Crónicos, Alfred Exterminator y los que mi memoria no recupera.

En MVD este conjunto de canciones se difundió solo y de boca en boca. O mejor: de copia en copia. Hubo personas claves para que ello ocurriera. Salve, amigos!

El Vikingo, Ricardo Dandraya, Gabriel Barbieri, Nicolás Barcia, Magdalena Raineri, Ernesto Tabarez y Romina Peluffo, Gustavo De León, Enrique Hackenbruch (R.I.P.), Emiliano Coduri, Esteban Demelas, Victoria Ismach, El Mingus, Walo Crespo, Iván Krisman, Juan Sacco, José Nozar, Carlos Cotelo, Daniela Calcagno, María Pía López, La Hermana Menor, Los Rockadictos, Ana Prego, Daniel Altamirano, Laura Andina, Ángel Atienza, Nelson Barceló, Juan Bena, Colo Amén, Duke, Gonchi López, Jay, Pau, Riki Musso, JAVernengo, Pipa Silvera, Coronets Gold... y los que me faltaron.

Nota del productor:
Este disco estuvo pronto para ser editado a finales de 2013. Como podrán leer más abajo Andy escribió todas las notas de carátula y lo que demoró la salida inmediata fue la idea del diseño en general que luego de varios intentos con distintas personas y bajando a tierra algunos sueños que costarían mucho más de lo invertido en la grabación, finalmente la fotógrafa y diseñadora Mariana Méndez llevaría a cabo el trabajo junto a Andy. Los meses pasaron y quedamos desconectados… mucho tiempo después Andy cayó enfermo y el proyecto quedó paralizado… cada tanto tiempo fui a visitar a Andy en su habitación del hotel Hispano y la idea de publicar el disco chocaba con los diferentes estados de ánimo de nuestro héroe y su frágil existencia. Lamentablemente no llegamos a tiempo para que Andy tuviera el disco en sus manos y si finalmente ahora ve la luz es gracias al empuje de sus amigos más íntimos que permiten que este legado de Andy esté a disposición de todos. A continuación una mínima crónica de aquellos días y el texto completo aprobado por Andy para la carátula.

Querido Ángel:

Hablé con Gustavo De León y se alegró de volver a trabajar juntos. Tentativamente me dijo que la semana entrante tendremos chance de llevar a cabo el trabajo. A las 16 hablaré con Rafael Abal para marcar las horas y explicarle la labor, que en esencia consta de una transferencia. Me ilusiona parir finalmente para tí un disco que por años regalé y ninguneé. Fue, sin embargo un disco que me llevó mucho tiempo y trabajo. Pero ambas cosas me sobraban así que fue un buen foco en tiempos apacibles pero vacíos. Algo me resultó muy cómico: cuando le recordé a De León el volcado a la Ampex de media pulgada para conseguir compresión única en la cinta magnética, me respondió que a partir del uso de dicha técnica en el disco de Ernesto Tabarez en el 2007, con mucha frecuencia la clientela le pide dicho servicio, por lo cual la Ampex está alineada y pronta para trabajar. No hace falta que diga que este recurso lo aprendí, de otra alma generosa: el guitarrista Matt Verta Rey, que usaba una antigua Studer para similares resultados.

De las 12 canciones, 8 están cerradas, 2 requieren recortar sub lows y las 2 "nuevas": requerirán homogeneización con las demás. En el caso de "Big Louise" de Scott Walker amerita una hora para expandir la poco ortodoxa orquestación que escucho GIGANTESCA. Luego, ir a la Ampex demanda tiempo real… Puedo asegurarte que todo estará concluido en una jornada breve. Junto a R. Musso, De León es el ingeniero que me lee y no me dice que algo "no se puede hacer".

Por años llamé al disco "Misal", "Misal para corazones desolados"… pero ahora que llega el momento de editarlo, la palabra misal me infectó por lo arcaica. Y no se trata de un misal. Son canciones de corazones rotos. Siguen las Liner Notes y el título que me está complaciendo al momento:

 

UN “ADIÒS” ENTRE DOS “ADIOSES”

Algunos años atrás decidí mudarme a Buenos Aires. Después de 16 años sin visitarla tuve la ocasión de tocar varias veces en un corto tiempo. La atmósfera que respiré me resultó vital e inquieta. Así marché con lo básico y desmesuradas ilusiones. A menos de una semana de llegado, esas ilusiones se tornarían en papel chamuscado como resultado de la catástrofe de Cromañón. De la noche a la mañana, el funcionamiento de la música “en vivo” de las bandas “chicas” en el que me he movido toda mi vida, cambió drásticamente. Literalmente: la música “en vivo” dejó de existir y la sensación entre mis pares se colmó de franca desazón.
Compartía un departamento con un living – comedor amplio de unos 3,5 x 7 m, de superficie dura y ubicada en una calle tranquila. Las obligaciones de mi asociado, el feroz y notable bajista MARCELO DIPAOLA, me daba muchas horas para tocar y freírme en mis propios jugos. Con la ayuda de MARCELO DIGREGORIO (ingeniero de la Vieja Guardia y un analista agudo en cuestiones estéticas) finalmente ingresé al universo de la grabación multipista digital. Marcelo me prestó una Power Mac G3 de 1997 (a carbón o anti tusivo) dotada con un Pro Tools 2.0 de 1993, que no admitía “plug ins” y que como consecuencia de las limitaciones del conversor análogo – digital (MoTU), me daba un tope de escucha de 8 pistas en simultáneo.
Llevaba tiempo resistiéndome a la “digitalización”. Mi principal reparo que tuve y tengo era lo cristalino del sonido, lo prístino y delgado. Mi remedio fue “degradar” tomas digitales volcándolas a mi querido y fiel Portastudio TASCAM 414 (a casete y de 4 pistas), y volver a digitalizar el producto. Lo digital, en particular lo de pobre calidad, carece de organicidad. No ofrece la compresión de la cinta magnética.
Compromiso aquí, compromiso allá, logré fusionar soportes y con rezagos tecnológicos me tracé un plan harto vago.
Reunir una colección de canciones favoritas me rondaba la cabeza desde siempre, y mirar la calle solo me empujaba a mirar hacia dentro mío.
Las gigantescas limitaciones tecnológicas con las que trabajaría en los siguientes meses las veo hoy con humor, fanfarronería y las considero que hicieron del resultante algo singular. Básico y carente de artilugios. Al fin y al cabo, todo fue capturado con un micrófono Shure SM57…

1) OVERTIME – LUCINDA WILLIAMS

Como tantos descubrí a L.W. gracias al tremendo promo que recibió su “Car wheels on a gravel road”. Sin embargo su carrera, para ese entonces, llevaba unos 10 años. “Overtime” vino dos años después y su sencillez y el juego de la palabra overtime (“con el paso del tiempo”, “en horas extras”) me sedujo de inmediato. Hecho en Portastudio con los vocales en vivo. El trémolo es de un Ampeg pasando por un Eminence de 12”. La pseudo mandolina: un dobro.

2) BY THE TIME I GET TO PHOENIX – JIMMY WEBB

Quedé mesmerizado con esta pieza cuando la conocí vía  Nick Cave. Fui marcado por los sublimes arreglos de Mick Harvey que construyó quizás la más grande colección de versiones bajo el sol. He tenido al menos 3 copias del “Kicking against the pricks”. Tiempo atrás me topé con la partitura de la canción que exóticamente traía un cifrado más que digno. Sin ella, jamás habría siquiera intentado. Jimmy Webb fue un niño prodigio que escribió hits para 100 artistas. El “Kill city” de James Williamson e Iggy Pop (otra genuina obra maestra) fue grabado en la mansión de Webb. “By the time…” posee un drama en su letra, una inteligencia que son muy pocas las canciones que pueden hacerle sombra.
La mujer se hace más y más pequeña mientras el Grayhound sigue su camino, pero ella no puede admitir que su hombre finalmente puso fin a amenazas en vano.

3) GUESS I´M DOING FINE – BECK HANSEN

Beck ha probado con creces ser un artista sabio y escurridizo. El “Sea change” de donde sale esta perla es un disco rico en capas y estados de ánimo. Un buen disco de cabo a rabo. La letra es engañosa e irónica. Mi instrumentación, pese al clonado del tambor en reverso del inicio, quedó algo raquítica. Fue el vocal que pude bajar hasta mi genuino asombro junto a los coros pasados por un eco a cinta infinita (Echoplex) lo que generaron la suficiente distracción.

4) TOO FAR GONE – BILLY SHERRILL

Emmylou Harris calzó perfectamente en el C&W que Nashville determinó producir en masa. En ese blanqueo se perdieron cosas valiosas. Tammy Wynette, Loretta Lynn, Dolly Parton, y 100 más lo vivieron en carne propia. “Too far gone”, con esa orquestación mullida me golpeó con la elegancia del entonces marido de Emmy. Factiblemente escrita para ser interpretada por un hombre, ella la vuelve toda dulzura y pena sin alivio. Nada ya importa. Ofelia pierde la razón por su amor no correspondido. El solo de James Burton lo copié nota por nota y la pseudo pedal steel creo que fue un D abierto.

5) I´M NOT THE LOVING KIND – JOHN CALE

De sus prolíficos años para Island Records. Amputar las cuerdas y los coros era un insulto. Me aferré al slide de Chris Spedding y nuevamente el Echoplex añadió soplido y coros no convencionales. A pesar de mi idolatría por Cale, su lírica siempre me resultó lo más débil de su obra. Pero aquí, la distancia, la advertencia, el frío y la crueldad generan algo excepcional.

6) FOR OL´ TIMES SAKE – TONY JOE WHITE

Este joven de Louisiana, debió gran parte de su éxito a escribirle hits a Elvis Aaron Presley. Esta hermosa y estructuralmente perfecta balada la encontré en un recopilatorio de cuestionable linaje. En él, la calidad de “For ol´…” era claramente inferior al resto del material del Fox. Quiero creer que no es descabellado que aprendí la canción del mismo demo que El Rey. Juro que mi tentativa suena mejor que la versión de la que la absorbí.
Un hombre terco quiere revivir aquello que fue bueno otrora.

7) LAURA WONDERS – ANDY ADLER

Mi pequeño aporte al disco. Data de pre Buenos Aires y está dedicado con todo mi corazón a mi gran amiga, Laura Andina. Grabado en Portastudio, se trató de una suerte de experimento para probar una guitarra que había conseguido en una permuta. Dos eléctricas limpias + otra con trémolo, a través de un ampli Hondo II con un parlante tumba de 8” + una acústica y un dobro. Hay yerros. Mis yerros. Aprendí a vivir con ellos.

8) HEARTS ON FIRE – WALTER EGAN & TOM GUIDERA

Intenté cantar esta balada desde que la escuché por primera vez en un cassette de una emisión radial de Staten Island donde los Fallen Angels de Gram Parsons se habían presentado. Pero el dueto, el rencor y los registros me superaban. 15 años después hice a un lado mis reservas y cargado de suficiente coraje, registré este humilde tributo al inmortal Parsons. El vocal digital, lo llevé a análogo y vuelta a digital creo que en tres ocasiones hasta que me dejó de lastimar.

9) THAT LUCKY OLD SUN – HAVEN GILLESPIE & BEASLEY SMITH

Cantada por cientos. Tal vez ya sea parte del Dominio Público. La aprendí del Hombre de Negro. La grabé en Portastudio en MVD. Toqué y canté lo más que pude. Todo apilado en el menor espacio posible para dejarle un track libre a Riki Musso para que metiera ese órgano Lowrey de Gospel, que estaba afinado medio tono abajo y que comprado en un remate, funcionaba muy temperamentalmente. Especialmente los días de humedad.

10) NOT DARK YET – BOB DYLAN

Sendo atrevimiento el mío. Con el agravante que el original fue producido por Lanois.
Pero es que la letra es un aullido ahogado. ¿Tan pocos son los ojos que miran con esa misericordia?
Directo a Portastudio. El slide (RAT + Echoplex) fue una toma y poco me importó violar el canon de hacer fills encima del vocal, ya que luego puse horas de edición. En la compu añadí bajo, dobro, tambor. El vocal es una toma única, degradada y re-alimentada de a versos, debido a las fluctuaciones de velocidad del motor del Portastudio.
“No se escucha ni el rumor de una plegaria”.
Así elegimos vivir y morir.

11) THAT´S ALL, AMEN, CLOSE THE DOOR – RICHARD THOMPSON

De su colosal “Mock Tudor”. Ahora edita por su propio sello luego que Capitol lo echara después de 35 años. La recompensa a vender tan solo 100.000 copias anuales y haberle generado millones a la discográfica.
La mirada madura y endurecida de la letra me resulta un cierre apropiado para un tipo de 50 años como yo. Las cosas comienzan de manera tan espontánea e irracional como terminan. Escondida, escuché una secuencia reminiscente de Piazzolla, que luego se eleva para celebrar con estribillos y solos que Tom Verlaine tocaría de cargar con más Academia.
A la dificultad de la afinación no tradicional se sumaba el que Thompson hace parecer todo estúpidamente sencillo. No creí poder con ella, pero sudé y obtuve algo parecido.
Y ¿por qué mentirme? Quería tocar un poco de guitarra eléctrica.
“Hay belleza en lo breve. Hay belleza en lo pequeño:”.

12) BIG LOUISE – SCOTT ENGEL

La anomalía de esta colección Mi aproximación juro que intentó ser tradicional frente a esta obra maestra de Scott Walker, arreglada futurísticamente por Wally Stott que vio la luz en ese annus mirabilis de 1969. Pero tempranamente todo comenzó a desviarse y me dejé llevar por ese sendero mal iluminado. Al cabo de un rato, otro animal había cobrado vida. Solo guitarras y esos bizarros cymbales procesados por el Echoplex. El “animal” es lo que denomino una genuina “versión” como opuesto a un “cover”. Muy a mi pesar, a lo largo de los años han sido muy escasas las versiones en mi repertorio. La letra pinta el retrato de una travesti en decadencia y abandonada.
Es más triste que un árbol de Navidad, seco y ardiendo.

TÉCNICA:
Living comedor Unit: Portastudio TASCAM 414, Power Mac G•, MoTU (8 in/out), auriculares Sony MDR-V6, potencia Harman/Kardon AVR10, monitores sin tweeters JBL Flix 1 Sorround de 4”.
Horror Mansion Unit, B.A.: PC con Pro Tools 7 y plugins crackeados y comprados en el Parque Rivadavia, Edirol (8 in/out), pre M Audio de 2 canales, potencia y monitores de un minicomponente AIWA.
Micrófono: Shure SM57 y en “That lucky old sun” un Shure Beta.
Guitarras: Yamaha 330, Guild Starfire, Epiphone Firebird, Fender Telecaster, Ampeg GE 500, dobro Regal RD 45, bajo húngaro.
Efectos: Boss DD3, Echoplex EP3, ProCO RAT, Fenjder Blender, trémolos de Ampeg G212 y de Digitech RP6, reverbs de Fender Blues Jr., Deluxe Memory Man modificado.
Amplificadores: Ampeg G212, Fender Blues Jr., Hondo II HAR200AMP, Sans Amp Classic.
Teclados: Lowrey de consola.
Batería: Alesis HR 16 bits.